Un 16 de noviembre de 2009 falleció mi maestro Juanjo Linares. No voy a hablar de su carrera como bailarín, coreógrafo, investigador o maestro, eso ya es conocido. Escribiré sobre lo que me enseñó y transmitió.
Tomé clases con él en varias ocasiones, pero cuando realmente empecé a tener una relación más estrecha con mi maestro fue a partir del año 2006. Asistí a sus maravillosas e interminables clases en la APDCM. Le llevaba a su casa de vuelta en mi coche y allí me contaba un montón de historias. Comencé, entonces ,a cambiar mi mentalidad sobre el folclore.
Juanjo me enseñó que la danza viene del pueblo, de su vida y de sus tradiciones, que bailar es un sentimiento. Según me contaba, cuando él se iba de gira, en cada pueblo que paraba se preocupaba de investigar y conocer las danzas de esa región. Preguntaba y preguntaba hasta que al final daba con la persona que le enseñaba aquellos bailes que se habían transmitido de generación en generación y que no estaban documentados. Era el saber popular. Los aprendía, documentaba, con una memoria increíble retenía todos los pasos y la música, su guía para recordarlo todo. Pero para él lo más importante no eran los pasos, era el estilo, la peculiaridad de las danzas en cada región, la manera de moverse, los brazos, los movimientos de caderas, en definitiva EL AIRE, siempre distinto y siempre característico de cada pueblo.
Y todo lo que aprendí de forma teórica y la gran humanidad que supo transmitirme, lo traduje en una manera distinta de dar mis clases. Siempre hablo a mis alumnos de tradiciones, de como la mujer camina con un movimiento único al mover las caderas cuando su falda roza las pantorrillas, como el pueblo viste según la región, la temperatura, el suelo, etc. Como, no hace tanto tiempo, se vivía de forma muy distinta, cómo eran las fiestas… Y como nosotros podemos coger toda esa riqueza y evolucionarla y adaptarla. En su museo del traje de Ordes, está expuesto un vestido de cristianar que yo le regalé, me hizo partícipe de su proyecto más ambicioso pues donó mas de mil trajes tradicionales que recopiló durante toda su vida. Una valiosísima colección.
He tenido la oportunidad de representar sus bailes en el escenario. Mi pequeña muestra de agradecimiento fueron los videos que colgé en youtube, pues él siempre fue generoso con todas sus enseñanzas. Gracias Maestro.
Ojalá consiga enaltecer la danza española que cuando se conoce maravilla y se disfruta.